El silencio de la noche
La mente habla
La existencia se cuestiona
Las palabras me confunden, e idealizo con un mañana
Un mañana inexistente, un mañana que solo está en mi mente
Pero lo siento tan cerca, que hasta me siento terca.
Extrañando esas noches de desvelo, me encuentro
Tratando de hallarle sentido a lo vivido
Olvidando el poder de lo sentido y de lo que me ha destruido
Hoy solo existo, pero sé muy bien lo que he visto.
Mis escritos llevan verdades comunes, lo que un ojo común no aprende ni sorprende
La naturaleza está en mi y en los míos
El arte me consume cada día, aún en la monotonía
¿Quién dijo que se necesita una galería para hacer arte? si con tu mera existencia ya estás siendo arte.
El amor me apasiona, el dolor lo confirma
Aún espero el eco de mis deseos, sin consciencia ni esfuerzo
Las mañanas me motivan y las tardes me acribillan
Hoy solo escribo lo que mi alma grita.
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